El sábado 12 de diciembre, el Monasterio de la Cartuja acogerá el III Encuentro Balcánico de la ciudad de Sevilla. Una jornada de acercamiento a las culturas de la Europa del Este con actividades que girarán en torno a la música y lo festivo.
Las fronteras entre la cultura balcánica y andaluza son delgadas en multitud de ámbitos de la vida. No podría ser de otra forma dada la amalgama de culturas de las que son fruto: confluencia de culturas gitanas, árabes y judías, de espíritu nómada, crisol de pueblos apátridas perseguidos y castigados.
Estos lugares comunes hacen que expresiones artísticas como la danza o la música compartan pasión, sentimiento y movimiento. Texturas y sabores que parten del más profundo sufrimiento humano emergiendo para celebrar la vida. Estas expresiones artísticas compartidas son memoria viva de pasados que no debemos olvidar en nuestra resistencia cotidiana frente al racismo, la xenofobia y las guerras genocidas.
Hace unos años comenzó a caminar una corriente artística en Andalucía que, a día de hoy, ha madurado desembocando en interesantes propuesta. Este es el punto de partida para el III Encuentro Balcánico que pretende seguir acercando la tradición festiva de la Europa del Este a Sevilla. Vínculos que se conectan y establecen desde propuestas artísticas andaluzas que beben de los pueblos hermanos del Este, enriqueciendo así nuestra cultura.
Durante la mañana, danza, teatro, circo y magia harán las delicias de grandes y pequeñas. También está programado un «duelo de acordeones», un instrumento clave de estas músicas. Las propuestas vespertinas cubrirán parte del rico espectro musical que estas tierras ofrecen, yendo desde la música klezmer propia de la cultura judía askenazi hasta la música balcánica del pueblo gitano. Estas músicas no conocen fronteras y habitan en Rumanía, Serbia, Bosnia, Macedonia, Bulgaria, Polonia y gran parte de los países del antiguo imperio ruso, entre otros.
¡A bailar todo el mundo!